El primer encierro urbano de la Feria Taurina deja una sensación agridulce
En un ambiente festivo, pero con un espectáculo que no cumplió las expectativas, se llevó a cabo el primer encierro por las calles de Cabanillas del Campo. Este evento, que tuvo lugar el sábado 26 de julio, atrajo a una gran multitud, aunque la emoción fue escasa debido a la falta de embestidas de los toros.
El recorrido comenzó en la Plaza de Toros y se extendió por la calle Valdemoma y la calle Soledad, adyacente al Cementerio Municipal. A pesar de la buena afluencia de público tanto en los tendidos como en los laterales del trayecto, los toros mostraron una actitud reservada, lo que limitó el dinamismo del festejo.
Un espectáculo sin incidentes
A diferencia de los encierros previos realizados en el campo durante jueves y viernes, este evento no logró transmitir la misma emoción. Los toros estuvieron parados y reacios a embestir, resultando en pocos quiebros y recortes visibles. En total, se lidiaron dos ejemplares: uno perteneciente a la ganadería gaditana "Herederos de José Luis Osborne Vázquez" y otro de Villabella, originaria de Membrillera. El festejo concluyó antes de las dos horas sin que se registraran incidentes ni fuera necesaria intervención sanitaria.
Previo al encierro principal, los más pequeños disfrutaron del tradicional "encierro infantil", donde corrieron delante de carretones. Además, durante el evento, la peña Los Tablillas ofreció limonada a los asistentes.
Expectativas para el próximo encierro
Para este domingo está programado el segundo encierro por las calles, que será el último festejo de esta Feria Taurina. Se espera que comience a las 19:00 h, ofreciendo una nueva oportunidad para revivir la tradición taurina en Cabanillas del Campo.