Lucía Duque, protagonista del Homenaje al Mayor de Quer

A partir de las 17:30 horas de la tarde, daba comienzo en Quer el homenaje al mayor, que ha cumplido en el año 2015 su décimo aniversario, habiendo homenajeado ya a diecinueve abuelos seteros.

Este año le correspondía el turno a Lucía Duque, una de las más activas y pizpiretas integrantes de la Asociación de Mayores local. Lucía nació en Salorino (Cáceres) el 16 de mayo de 1939, fue la segunda hija de Ignacia y Sixto. Llegó a Alcalá de Henares con tan sólo nueve meses. Sus padres, junto a su tío Anacleto, se habían trasladado a la ciudad complutense por motivos de trabajo.

Lucía creció y trabajó con su familia en la finca de El Cerrillo, que también está en Alcalá de Henares. En la ciudad conoció a amigas, y a Pedro García, el amor de su vida, que por casualidad trabajaba en la finca de al lado, La Garena. Se hicieron novios cuando Lucía tenía 19 años, y se casaron el día 4 de septiembre de 1965, igualmente en Alcalá de Henares. Hasta que se contrajo matrimonio con Pedro, Lucía trabajó en la finca, junto a su hermana Beatriz, llevando a cabo tareas ganaderas y agrícolas, principalmente atendiendo a una granja de “3000 gallinas nosotras dos solas”, recuerda.

Fueron de viaje de novios a Gijón, a casa de unos familiares “en un tren de madera”, recuerda. El matrimonio tuvo tres hijos, Pedro José, Ignacio y Belén. En 1976 llegaron desde Alcalá a Quer, donde construyeron una casa con muchísimo esfuerzo. Trabajando de sol a sol los fines de semana, consiguieron terminarla. “Con hacer la casa y dar estudios a nuestros hijos, tuvimos bastante, pero el esfuerzo ha merecido la pena”, reconoce Lucía.

La casa ahora es el sitio de recreo de la familia y en muchos tramos del año, residencia habitual del Pedro y Lucía. El matrimonio se integró totalmente en Quer. Lucía fue una de las pioneras de la Asociación de Mayores y de la Hermandad de Nuestra Señora de La Blanca. Es devota del Cristo de la Misericordia, y está muy orgullosa de que su hijo Ignacio fuera Hermano Mayor hace dos años. Además de Pedro y el resto de su familia, sus dos grandes amores son Nacho y Lucía, sus nietos. Inscribió a Nacho como hermano del Cristo nada más nacer.

Nada más terminar la presentación de la trayectoria vital, que fue narrando Lourdes Jiménez, concejala de Bienestar Social, el alcalde de Quer tomó la palabra para deshacer el nudo en la garganta que aún tenían las más de cincuenta personas presentes en el homenaje. José Ramón Calvo le hizo entrega de una placa en reconocimiento y distinción de su trayectoria vital, y cerró la presentación diciendo que “pese a no ser nacida en Quer, hoy reconocemos tu valía humana y personal, porque Lucía tu siempre serás de este pueblo”, terminó.
El párroco local, Alfonso Olmos, estuvo presente en el Homenaje al Mayor. “Me ha emocionado. Llevo cuatro meses como cura del pueblo, y me gustaría subrayar el cariño que pone la gente en sus celebraciones, sobre todo en esta, tan emotiva, en la que se pone en valor el esfuerzo de los mayores”.

Después del homenaje, los seteros jugaron el tradicional torneo de cartas de fiestas, y al filo de las nueve de la noche, se entregaron los trofeos a los ganadores, terminando así la celebración de San Vicente 2015.